Este proyecto utiliza la expresión artística como herramienta de acción, integrando el lenguaje de la plástica, la danza, el circo y el performance.
Se propone viajar de comunidad en comunidad y trabajar con base en las problemáticas que allí se estén viviendo, desde una perspectiva superadora y propositiva, no sólo crítica y visibilizadora.
Concibe la itinerancia como enfoque de trabajo en un hacer en, con y entre la comunidad en la que se inserta. Es decir, no se trata de “ir a llevar” -y llegar con- una propuesta cultural cerrada, impenetrable, invadiendo el lugar en el que se asienta, sino más bien, trazar una convivencia intercultural de retroalimentación mutua. Es decir, pasar de la unidireccionalidad de discurso a una interrelación que supone un dialogo abierto entre el colectivo y la comunidad, concibiéndonos como sistemas relacionales en convivencia.
Instalaciones escénicas e intervenciones performáticas.
Los “Nidos” se piensan como instalaciones artísticas de diferentes materiales, envergaduras y formas, que se construirán, al igual que todas la intervenciones, teniendo como base las problemáticas de la comunidad donde el colectivo se asiente.
El trabajo se desarrolla en varias etapas interconectadas en el tiempo que dura la estancia. Cada vez, con la flexibilidad y apertura que implican el llegar a donde no se conoce y escuchar lo que en esos momentos acontece en esa comunidad.
Las intervenciones y todo el trabajo que se realiza in-situ, tienen como fin -y principio- poner en cuestión, de manera propositiva, los sistemas de pensamientos sobre los que se construyen las realidades y las problemáticas que dichas comunidades viven y las posibles vías de trascendencia de las mismas, para que desde allí, se abran nuevas maneras de ver y accionar sobre el panorama que tienen en frente.
El trabajo nunca tiene como propósito dar soluciones fáciles, “hechas”, ni pronunciarse según una visión particular en relación a lo que debiera o pudiera hacerse en pos de trascender esas problemáticas. Lejos de esto, el compromiso es tomar las problemáticas para que sean llevadas, en medio del desarrollo del trabajo en esos días, a ser atravesadas con principios de vida, universales, de los que en general el mundo y sus cuestiones están muy alejados, para que desde allí, el “conocimiento” y la “enseñanza”, por sí solos, ingresando en la consciencia de la comunidad, abran la visión a nuevas vías de acción.
Primera fase
La primera etapa de “asentamiento” es “armar el nido”. El trabajo comienza con la construcción, en cada ciudad, pueblo, familia, comunidad, espacio, escuela, etc., de una instalación escénica: “Nidos”.
La actividad abre al diálogo con la comunidad que, intervenida con esta acción, se acerca a interactuar y conversar. En este pasar de días durante el armado, en la convivencia con la gente, el lugar, las cosas; tiene lugar, el ejercicio de recuperar el encuentro y el diálogo con las personas de la comunidad, a la vez que se encuentran los materiales conceptuales con los que trabajar.
Existe la intención de que participen de dicha construcción, no solo los integrantes de A-Nido, sino también referentes y artistas de la comunidad, y toda persona que lo desee… esto quedará librado a le fluir de cada situación en particular aun cuando las invitaciones se hagan abiertamente expresas.
El trabajo que nos proponemos llevar a cabo nace de este diálogo. Nace de la escucha de las problemáticas que están atravesando a esa comunidad. A la vez que se escucha en el fuero interno qué es hacer allí, cuál es la “intervención artística”, la ofrenda que como colectivo debe hacerse. Se recopilan voces, haciendo análisis mientras se arma el nido y se comienza a trabajar en relación a lo que queremos “sembrar”. Todo ello reúne el material base con el que, simbólicamente, trabajaremos en la diagramación de ciertas acciones, intervenciones artísticas.
Segunda fase
Una vez concluida la construcción de la instalación, se mapea, en reuniones colectivas, los conceptos con los que se trabajará en las intervenciones escénicas performáticas, que nacerán derivados de las problemáticas comunitarias.
Se propone alcanzar estas realizaciones a través de un proceso creativo guiado Sebastián Rojo, con quienes quieran participar, y que sean parte de la comunidad local. Este proceso implica trabajo específico de “taller” a realizarse durante la semana previa a la presentación de las intervenciones. Desarrollo de las intervenciones.
Tercera fase
A posterior de las intervenciones se ocuparán algunas sesiones en los días ulteriores para abrir el diálogo con la comunidad con el objetivo de revisar en palabras lo que ha sucedido en todo este transcurso de trabajo.